miércoles, 30 de septiembre de 2009

Resucitando un Scalextric (I)

Hace unos días encontré en un armario una vieja caja de lejía con un juguete al que en su día no saqué todo el partido que se merecía. Se trata de un Scalextric, si no mal recuerdo el modelo GP-62. Mi abuelo nos lo compró a principios de los 80 y jugamos bastante con él durante un verano que pasamos en una torre (aquello era bastante espacioso), luego lo sacamos dos o tres veces y finalmente terminó en lo alto de un armario tras pasar por el trastero. Los coches, al ser más vistosos, adornaron durante un tiempo una estantería, pero acabaron en un cubo de juguetes viejos.

No tiene el glamour de la caja original pero es innegable su carácter vintage...

No tengo la caja original (algún friki del mundillo Scalextric me mataría por esto), pero casi todas las piezas están ahí. El estado de conservación de muchas piezas no es el idóneo: algunas pistas están corroídas por la humedad, hay una barrera mordisqueada por un perro (...), y posiblemente falten piezas para los peraltes y las curvas.

Ese óxido va a llevar muuuuuuucho trabajo y algún estropajillo verde...

Respecto a los coches... bueno, mejor que veáis la siguiente foto. A uno le falta la cabeza del piloto y ya lo he rebautizado como "Sleepy Hollow", y en general ambos tienen las ruedas agrietadas, les faltan piezas ornamentales (en el motor), las pegatinas están incompletas y las escobillas están deterioradas.

Con ustedes Fernando "Sleepy Hollow" Alonso y Kimi "Ice man" Räikkönen.

Bueno, mi idea una vez hecho el recuento de piezas, montado el circuito para medirlo y ver que no faltan piezas, y cuando haya comprobado que al encender la fuente de alimentación aquello sigue funcionando y no arde (nota mental: comprar un extintor), es ensamblarlo sobre un soporte de madera con algunos ornamentos, pero de forma que pueda montarlo y desmontarlo rápida y fácilmente.

Este es el contenido de la caja, podéis ver los mandos de gatillo, el puente de cartón o los quitamiedos.

Para ello, previamente tendré que repasar el circuito pista a pista, limpiarlas y puentear aquellas que hayan perdido conductividad.

Mi padre tuvo que puentear esta pista, ya que la conductividad era escasa.

Los coches también necesitarán algunos trabajitos, como cambiar las escobillas y los neumáticos, enderezar algún alerón si es posible, y por supuesto encontrar una cabeza para "Sleepy". Y quizás sustituya algunos elementos como los elevadores del peralte y los desmontables de cartón del puente por piezas de madera. Debajo del circuito me gustaría colocar una alfombra de hierba artificial (dependerá del coste), algunos focos hechos con leds, una pequeña grada e incluso tal vez medio neumático viejo de bici a modo de arco, como en algunos circuitos reales.

¡¡¡El Gran Premio PakoRock de Scalextric está a punto de comenzar!!!

Por cierto, al montar el circuito me sobró una pista recta larga, lo que significa: a) que es una pista de recambio, o b) que faltan pistas. Espero que sea la a)...

Si todo va bien iré colgando aquí mis progresos en esta historia, así que ya os iré contando.


Salu2, Paco.

viernes, 4 de septiembre de 2009

El fin de los pioneros del rock and roll (1 de 2)

Siempre me ha parecido curiosa la forma en que terminó la "primera era Rock", por llamar de alguna manera al período que va desde el nacimiento "oficial" del rock and roll y el surgimiento de estrellas como Elvis Presley, Chuck Berry, Jerry Lee Lewis, Bill Halley y otros, hasta la aparición del twist y de la ola británica formada por The Beatles, The Rolling Stones, The Who y compañía. En ese período de unos 6-7 años muchas figuras nacieron y al poco se extinguieron o bien para siempre (cosas de la muerte), o bien temporalmente, aunque en el segundo caso el renacimiento nunca llegó al nivel de la primera aparición.

A pesar que la abundancia de "desapariciones" daría para (mal)pensar en una conspiración contra el nuevo género rock (inicialmente el poder lo vio como una forma de rebelión juvenil), creo que fue una serie de desgraciadas coincidencias. En este artículo revisaré los casos de las estrellas más conocidas de aquella época ordenados cronológicamente.

Comenzamos con el rocker Carl Perkins, que sufrió un accidente automovilístico en marzo de 1956 que le dejó fuera de circulación por una temporada, durante la cual vio como Elvis recogía los éxitos que él nunca consiguió, versioneando su tema "Blue suede shoes". Tras el accidente y la muerte de su hermano Jay por cáncer sucumbió a la bebida, retornando posteriormente aunque con menor éxito.
Poco se imaginaba el bueno de Carl lo poco que le duraría el éxito...

Little Richard, el autor de "Tutti frutti" o "Long tall Sally" se "autoinmoló" en 1957 cuando decidió abandonar el rock and roll y abrazar el evangelismo y el gospel, al tiempo que renegaba del rock por ser un estilo satánico. Como tantos otros, sus sucesivas vueltas al rock (durante años alternó entre religión y rock) no alcanzaron los niveles originales. A modo de curiosidad, mencionar que seguro que lo habéis visto en algunas series como "Las Vegas", "Los Simpsons" o "El príncipe de Bel-Air" interpretándose a sí mismo, y en otras haciendo papeles de ficción.
Aquí posiblemente ya estaba pensando "qué satánico que soy, ¡toco el piano de pie!".

Y llegamos a Elvis Presley, el Rey del Rock (tengo un colega que me mataría si no lo llamo así) , que ingresó en el ejército como soldado raso en marzo de 1958 para hacer la mili -mayormente en Alemania- como cualquier hijo de vecino, para regresar 2 años después. Esto significó un frenazo en su meteórica carrera. A su vuelta se centró en actuar en películas de baja calidad, pero también grabó exitosos temas como "Can't help falling in love", "Love me tender", "It's now or never" y muchos otros, demostrando que aún conservaba su prodigiosa voz y gran talento como intérprete, por lo que su "desaparición" no está exactamente al nivel de sus coetáneos.
Mejor recordarlo así que no pasado de kilos, cebado a pastis y vestido de blanco con lentejuelas, ¿no creéis?

El que viene ahora no tuvo tanta suerte, ya que si bien en su retorno tuvo cierto éxito, quedó lejos del obtenido en sus comienzos. Se trata de Jerry Lee Lewis, "the Killer". El histriónico pianista e intérprete de temazos como "Great balls of fire", "Whole lotta shakin' going on" o "High school confidential" tuvo una vida privada bastante ajetreada que le llevó a casarse -sin divorciarse de su anterior esposa previamente- con su prima Myra, que contaba con 13 años por 1958. En mayo de ese año la prensa se hizo eco del asunto y su popularidad se hundió. Algunos años después volvió a grabar y a girar internacionalmente, pero su carrera ya había sido dañada. Como curiosidad, en 1973 grabó un álbum llamado "Jerry Lee Lewis Session" con colaboraciones de monstruos como Rory Gallagher, Peter Frampton o Alvin Lee. Pues bien, cuentan que en algún tema el bueno de Rory se atrevió a corregir a Lewis y este no se lo tomó muy bien. Pero si escucháis el álbum veréis que en algunos temas el tono del piano sube o baja sin venir a cuento. Cosas de los genios...
"Este piano me está pidiendo a gritos fuego, ¿que no? Sole, dame el mechero."


Otro día continúo... Salu2, Paco.